4º domingo de Adviento – C. 1ª lectura 1 Pero tú, Belén Efrata, aunque tan pequeña entre los clanes de Judá, de ti me saldrá el que ha de ser dominador en Israel; sus orígenes son muy antiguos, de días remotos. 2 Por eso Él los entregará hasta el tiempo en que dé a luz la que ha de dar a luz. Entonces, el resto de sus hermanos volverá junto a los hijos de Israel. 3 Él estará firme, y apacentará con la fuerza del Señor, con la majestad del Nombre del Señor, su Dios; y ellos podrán reposar, porque él será grande hasta los confines de la tierra. 4a Él mismo será la Paz. Comentario a Miqueas 5,1-4 El horizonte, entenebrecido por unos momentos en los versículos precedentes (4,9-14), vuelve a abrirse alegre con el anuncio de un «dominador», o gobernante en Israel, que ha de nacer, «salir», de Belén, una ciudad de la región de «Efrata» (Gn 35,16). Con frecuencia se distingue la región de su ciudad más importante (1 S 17,12), pero en algunos textos ambas se identifican (...